Defraudados por la inmobiliaria “Mil Hogares” pidieron a las autoridades estatales y a la Fiscalía General del Estado Querétaro atender el fraude donde les ofrecieron viviendas que supuestamente estaban en “remate bancario”, incluso realizando contratos de compra-venta ante las notarías 15 y 20, estiman más de 50 defraudados, afirmó María del Carmen López, que viajó desde Tijuana para adquirir una vivienda en Querétaro y perdió todos sus ahorros.
Incluso la notaria 15 entregó el acta constitutiva a la inmobiliaria fraudulenta, que operó por más de 10 meses en la entidad.
“Yo vengo de Tijuana y me acerqué por vía redes sociales a la inmobiliaria de Mil Hogares, confiando en que iba a adquirir una casa que me ofrecieron como remate bancario la cual nunca me entregaron y se hicieron los pagos convenientes cuando lo solicitaron estas personas, a mi me tocó en la notaría 20, tengo entendido que también en la notaría 15 y me dio seguridad pensar que todo era legal y por eso seguimos el proceso, nunca pensamos que se iban a desaparecer al momento de la entrega de las llaves”.
El acercamiento fue en enero del 2023, donde contaban con una oficina en Constituyentes y se firmó la supuesta escrituración ante la Notaría No. 20, aunque la mayoría acudió a la Notaria 15.
“En el momento que me dejan de responder por la entrega de las llaves pensé que algo estaba pasando, fui a las oficinas y me di cuenta que ya no había nadie y me encontré a más personas para buscar si nos podían asesorar para ver qué podíamos hacer sobre el tema”.
Al respecto Gerardo Ruiz Espinoza, abogado de los afectados, explicó que lleva más de ocho casos sobre el mismo fraude, además de que tiene conocimiento de más que se están llevando en otras instancias.
“Realmente el factor del tema del notario fue clave porque esa fue la forma de enganchar la confianza de las personas que buscaban la confianza de la gente, engancharlos, argumentando que la situación la iban a formalizar ante notario y al llegar no estaban firmando ninguna compra-venta ni alguna adjudicación de remate bancario, realmente estaban firmando un contrato de prestación de servicios profesionales con esta inmobiliaria y el notario la operación que se llevaba a cabo ante su fe era la ratificación de las firmas de ese contrato de prestación servicios, que nada tiene que ver con una operación inmobiliaria y ese era el gancho para que la gente confiara en que era una operación realmente legal”.