Concierto para otras manos es una invitación a cuestionar las convenciones del arte y a reconocer la capacidad humana para adaptarse, inventar y resistir, incluso cuando el cuerpo no responde a los moldes establecidos.
Este fin de semana se proyecta Concierto para otras manos, una película que desafía los límites físicos y emocionales a través de una historia profundamente humana. La cinta se podrá ver este sábado 2 de agosto a las 20:00 horas y el domingo 3 de agosto a las 17:00 horas en la Cineteca Rosalío Solano, con entrada libre.
Dirigida por Ernesto González Díaz, la obra narra la historia de David, un joven con una condición física poco común: brazos más cortos, solo cuatro dedos en cada mano y audición parcial. Su deseo es tocar el piano, un sueño que se enfrenta a la incredulidad de su padre, José Luis, también pianista y compositor, quien no logra imaginar cómo su hijo podría lograrlo.
La cinta se centra en la relación entre ambos, marcada por la tensión, el afecto y la búsqueda compartida de una nueva forma de entender la música. Lo que comienza como una aparente limitación se transforma en una vía para reinventar la técnica y privilegiar la expresividad auténtica.
“La película retrata la unión entre un padre y su hijo a través de la música. Explora las expectativas parentales y resalta la perseverancia y el amor por la música”, señala el director Ernesto González Díaz.
Concierto para otras manos es una invitación a cuestionar las convenciones del arte y a reconocer la capacidad humana para adaptarse, inventar y resistir, incluso cuando el cuerpo no responde a los moldes establecidos.
