Información Históricos
En el corazón de las montañas de Oaxaca, la civilización mixteca nos legó una de las expresiones más poderosas de su memoria colectiva: los códices. Pintados con precisión y belleza sobre piel de venado, estos manuscritos no solo relatan hechos, sino que tejen un universo simbólico donde conviven dioses, reyes, guerreros y mitos de origen.
¿Qué son los Códices Mixtecos?
Los códices mixtecos son antiguos manuscritos pictográficos que funcionaban como crónicas visuales. Antes de la llegada de los españoles, los sabios mixtecos los elaboraban para preservar rituales, genealogías reales, alianzas políticas y epopeyas míticas.
Materiales
Fabricados en piel de venado o papel amate, se doblaban en forma de biombo o acordeón.
Lenguaje visual
Usaban símbolos, colores y figuras humanas o animales para narrar con profundidad, sin necesidad de palabras escritas alfabéticamente.
Códices Famosos
Ventanas al Mundo Mixteco
Códice Nuttall
Una obra maestra que narra las gestas del legendario Ocho Venado “Garra de Jaguar”, guerrero-diplomático que unificó territorios mixtecos.
Códice Selden
Incluye genealogías que enlazan a los gobernantes con linajes divinos, revelando cómo el poder se justificaba desde el cielo.
Códice Vindobonensis
Recoge mitos de la creación, ceremonias cósmicas y relatos de origen, reforzando la dimensión espiritual de esta cultura.
Importancia Histórica y Cultural
Más allá de su valor como archivos históricos, los códices mixtecos son símbolos vivos de una identidad milenaria:
Memoria visual
Conservan cosmovisiones, ritos y estructuras sociales que de otro modo se habrían perdido.
Legado artístico
Sus colores, trazos y composición siguen inspirando a artistas contemporáneos.
Conexión intergeneracional
Ayudan a las comunidades indígenas actuales a reconstruir su linaje y fortalecer su vínculo con la tierra y los ancestros.
Un Legado que Resiste
Durante la colonización, muchos códices fueron destruidos o saqueados. Sin embargo, aquellos que sobrevivieron siguen hablando con fuerza propia.
Están vivos en los museos, en las investigaciones académicas, y también en las luchas por la reivindicación cultural de los pueblos originarios.
Los códices mixtecos no son reliquias del pasado, son puentes que conectan al presente con una sabiduría ancestral que se niega a desaparecer.
